Tiempo de lectura: 2 minutos La tornillería adecuada para cada tipo de estructura es fundamental para garantizar la resistencia y durabilidad de la misma. Existen muchos tipos y modelos de
Tipos tornillos:
Son elementos de sujeción muy comunes en la construcción y la industria. Existen diferentes tipos, cada uno con características específicas que los hacen adecuados para diferentes usos.
Los de cabeza plana son los más comunes y se utilizan en una gran variedad de aplicaciones. Tienen una cabeza plana que se asienta sobre la superficie a la que se fijan, lo que los hace ideales para fijar placas o piezas planas.
Los de cabeza redonda tienen una cabeza redondeada que se asienta sobre la superficie a la que se fijan. Son ideales para fijar piezas que necesitan ser giradas con frecuencia, como por ejemplo, las que se encuentran en maquinarias.
Los de cabeza hexagonal, también conocidos como tornillos Allen, tienen una cabeza hexagonal que requiere una llave Allen para su instalación. Son ideales para fijar piezas que requieren una gran fuerza de sujeción, ya que la llave permite aplicar una gran cantidad de fuerza.
Los autorroscantes tienen una punta afilada que les permite perforar materiales blandos sin necesidad de hacer una perforación previa. Estos son ideales para fijar materiales como madera, plásticos o láminas metálicas.
Los de rosca métrica son utilizados en aplicaciones que requieren una gran precisión. Están diseñados para adaptarse a roscas con medidas exactas, lo que los hace ideales para aplicaciones en las que la precisión es esencial, como por ejemplo, en la industria automotriz.
En definitiva, existen diferentes tipos, cada uno con características específicas que los hacen adecuados para diferentes usos. La elección del tipo de tornillo adecuado dependerá de la aplicación específica para la que se requiere y de las características de la superficie a la que se fijará.
