Sensor es un dispositivo que detecta y responde a un estímulo físico o químico, como la luz, el sonido, la temperatura, la humedad o la presión. Los sensores se utilizan en una amplia gama de aplicaciones, desde la detección de movimiento en sistemas de seguridad hasta la medición de la temperatura en sistemas de climatización.
Puede ser tanto analógico como digital. Los sensores analógicos miden un rango continuo de valores, mientras que los sensores digitales miden valores discretos. Los sensores digitales son más precisos y confiables que los analógicos, y se utilizan comúnmente en aplicaciones críticas donde se requiere una medición precisa y repetible.
La mayoría de los sensores funcionan mediante un principio físico o químico. Por ejemplo, uno de temperatura puede utilizar la resistencia eléctrica de un metal para medir la temperatura, mientras que uno de luz puede utilizar un fotodiodo para detectar la cantidad de luz que incide sobre él. También pueden utilizar principios químicos, como la detección de gases tóxicos en el aire.
En la medicina, los sensores se utilizan para medir la presión arterial, la frecuencia cardíaca y la glucemia.
Los sensores también son una parte importante de la tecnología de Internet de las cosas (IoT). Los sensores pueden conectarse a una red inalámbrica y enviar datos a una plataforma de IoT para su análisis y procesamiento.
En resumen, es un dispositivo que detecta y responde a un estímulo físico o químico. Se utilizan en una amplia variedad de aplicaciones en la industria, la medicina, la seguridad y muchos otros campos. Pueden ser analógicos o digitales, y utilizan principios físicos o químicos para su funcionamiento.
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