En los últimos años las han ido haciéndose hueco en casi todos los hogares debido a sus multiples beneficios. Éstas son las ventajas de cambiar a bombillas LED:
Algo parecido a lo que conocemos hoy día como bombillas LED fue desarrollado en 1962. El gran desarrollo y aceptación de esta tecnología led ha hecho de estas lámparas la mejor alternativa. Otras tecnologías tradicionales como la luz incandescente, la luz de neón y al fluorescente son inferiores en muchas áreas. El auge también ha hecho posible la investigación y mejoras de la bombilla por lo que las bombillas tradicionales ceden paso a la tecnología LED por las grandes ventajas que ofrecen.
Características de las bombillas LED
La vida útil de una bombilla LED es hasta 30 veces más que una bombilla incandescente. 30 veces más que la de un tubo fluorescente, 25 veces más que la de un halógeno y 3 veces más que la de una bombilla de bajo consumo.
Las luminarias Led no se funden ni sufren roturas, si no que van sufriendo una degradación del flujo luminoso a lo largo de toda su vida útil. Se considera que cuando una bombilla LED llega aproximadamente a las 50.000 horas. Es cuando su flujo lumínico empieza a decaer por debajo del 70% inicial. Por lo que el mantenimiento de estas bombillas será menor que en las convencionales. El consumo de 50.000 horas es equivalente aproximadamente a unos 6 años dándole uso las 24 horas diarias de los 365 días al año. Por lo que está claro que obtenemos una ventaja económica ya que ahorramos en costes si elegimos una bombilla LED en vez de otras lámparas convencionales.
La tecnología LED está basada en la eficiencia energética y las inversiones en I+D+I de los últimos años han sonseguido mejorar esta tecnología llegando a rendimientos superiores a los 170 Im/w. Estas bombillas consumen hasta un 80% menos que las bombillas tradicionales.
Ventajas de cambiar a bombillas LED
Otra de las ventajas de esta tecnología LED es la naturaleza del encendido. Estas lámparas led se encienden instantáneamente al 100% de su intensidad, siendo más rápido que las fuentes de luz convencionales. Otros sistemas se van degradando por el número de encendidos y las bombillas LED no, siempre se encienden igual.
Otra ventaja es que no generan calor, por lo que no queman. El 80% de la energía que consume se convierte en luz al contrario que otras bombillas como las incandescentes que pierden ese porcentaje en forma de calor.
Además la luz que emite la bombilla LED es totalmente direccional por lo que no existen pérdidas lumínicas por reflesion. Esto contribuye en gran medida a un aumento de la eficiencia y rentabilidad, creando una gran ventaja al cambiar a bombillas LED.
Por otro lado encontramos la robustez extrema de esta tecnología lo que le permite reducir las continuas vibraciones que emiten otras bombillas convencionales.
Si todo esto fuera, los dispositivos LED son respetuosos con el medio ambiente ya que no contienen mercurio, son más duraderos, ahorran gran cantidad de energía y reducen la contaminación lumínica.